''Algunas veces no puedes elegir lo que te ocurre, pero sí puedes elegir en qué te conviertes por ello.''
N o c t u r n a E d i c i o n e s
4 0 8 p á g i n a s
I S B N : 9 7 8 - 8 4 - 1 6 8 5 8 - 9 1 - 0
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S i n o p s i s :
<<Soy la esclava de la lámpara. Tengo el poder de concederte tres deseos.>>
Zahra lleva tanto tiempo encerrada en su lámpara que cuando un ladronzuelo la descubre, se topa con un mundo muy distinto: ahora, la magia está prohibida y su nombre se ha convertido en una leyenda. Una aterradora por lo que le hizo a su anterior ama. Decidida a huir, Zahra acepta el trato que le propone el rey de los genios: la libertad a cambio de una terrible traición. Para conseguir su objetivo deberá ocultar su verdadera identidad y no separarse de su nuevo amo. Al fin y al cabo, Aladdín todavía tiene tres deseos que elegir.
Cuando decidí leer este libro lo hice con muchas ganas de adentrarme en un nuevo retelling. Hasta la fecha no había leído ninguno de Aladdín o, para ser más acertada, de Aladino de Las mil y una noches. De por sí, los retelling suelen gustar al lector por las emociones que despierta en él de tipo sentimental y, normalmente, de la infancia (gracias a, mayoritariamente, las grandes adaptaciones audiovisuales de Disney y otros estudios de animación). Como la historia de Aladdín ha llegado a mí de forma más bien tardía, sentí que era la oportunidad perfecta para juzgar de mejor manera las características de un retelling. Y creo que así ha sido.
Hasta la fecha Esta historia la protagoniza Zahra, una genio, o yinn, de más de cuatro mil años. Su voz en primera persona es la narradora del libro y este comienza en el momento en el que el joven Aladdín entra en la cueva donde ella ha estado encerrada durante quinientos años dentro de una lámpara. En mi opinión, que Zahra le de voz a la historia es el punto fuerte de este libro y lo que más puede diferenciarlo de otros retellings de Aladdín. De vez en cuando, los acontecimientos van dirigidos mediante alusiones y anécdotas a su habiba, una persona de su pasado muy importante para ella, un personaje clave para su identificación. De esta manera, el lector no solo está al corriente de lo que está ocurriendo en el presente, sino que se crea un contexto temporal y situacional fidedigno y completo.
Un aspecto a destacar de la pluma de la autora es lo bien que crea la ambientación. Olores, texturas, colores, sensaciones... ha sido muy visual en todas estas descripciones y transportan totalmente al lector. Uno de mis momento favoritos es el famoso instante en el que Aladdín coge la lámpara; la forma en la que se describe cómo Zahra sale de ella es simplemente espectacular.A modo personal, yo recomiendo, para disfrutar de una experiencia completa, leer este libro con la bso de las películas de fondo... ¡una gozada!
No obstante, tengo dos peros y son los motivos por los que no le he llegado a dar cuatro o cinco estrellas a esta lectura. La primera objeción es que, bajo mi humilde opinión, he observado que algunos (tampoco todos) acontecimientos se resuelven con bastante buena fortuna, es decir, me hubiera gustado percibir un peligro más real en ciertas circunstancias. Sé que la historia tiene magia, y eso, en general, facilita mucho las cosas, pero me he quedado con esas ganas de sufrir un poquito más en algunas partes de la trama. Creo que ese plus de emoción le hubiera venido muy bien a la historia. Por otra parte, la trama del amor la sentí un poco forzada. Se me ocurre cierto plot twist que me hubiera gustado ver, que iría más acorde con la historia original y que hubiera aportado un toque extra de drama. No quiero decir que tal y como se plantea en el libro no me haya satisfecho, es más, he vivido ese romance muy intensamente, pero no esperaba, una vez más, esa facilidad con la que surge y que, por desgracia, se hace previsible en un comienzo.
Hasta la fecha Esta historia la protagoniza Zahra, una genio, o yinn, de más de cuatro mil años. Su voz en primera persona es la narradora del libro y este comienza en el momento en el que el joven Aladdín entra en la cueva donde ella ha estado encerrada durante quinientos años dentro de una lámpara. En mi opinión, que Zahra le de voz a la historia es el punto fuerte de este libro y lo que más puede diferenciarlo de otros retellings de Aladdín. De vez en cuando, los acontecimientos van dirigidos mediante alusiones y anécdotas a su habiba, una persona de su pasado muy importante para ella, un personaje clave para su identificación. De esta manera, el lector no solo está al corriente de lo que está ocurriendo en el presente, sino que se crea un contexto temporal y situacional fidedigno y completo.Un aspecto a destacar de la pluma de la autora es lo bien que crea la ambientación. Olores, texturas, colores, sensaciones... ha sido muy visual en todas estas descripciones y transportan totalmente al lector. Uno de mis momento favoritos es el famoso instante en el que Aladdín coge la lámpara; la forma en la que se describe cómo Zahra sale de ella es simplemente espectacular.A modo personal, yo recomiendo, para disfrutar de una experiencia completa, leer este libro con la bso de las películas de fondo... ¡una gozada!
Las historias son verdades que se cuentan a través de mentiras.Y en cuanto a las similitudes y diferencias con la historia original, algo que me encanta observar en los retellings, he de decir que estoy, en casi todo, encantada. El personaje que más me ha gustado después de Zahra es Cáspida, una Jasmine renovada, fuerte y con un poder más feminista que nunca. Ha sido una grata sorpresa ver lo bien construido que está este personaje y el homenaje que se le hace al mítico personaje, ya que lo ensalza y lo dota de mucho valor.
No obstante, tengo dos peros y son los motivos por los que no le he llegado a dar cuatro o cinco estrellas a esta lectura. La primera objeción es que, bajo mi humilde opinión, he observado que algunos (tampoco todos) acontecimientos se resuelven con bastante buena fortuna, es decir, me hubiera gustado percibir un peligro más real en ciertas circunstancias. Sé que la historia tiene magia, y eso, en general, facilita mucho las cosas, pero me he quedado con esas ganas de sufrir un poquito más en algunas partes de la trama. Creo que ese plus de emoción le hubiera venido muy bien a la historia. Por otra parte, la trama del amor la sentí un poco forzada. Se me ocurre cierto plot twist que me hubiera gustado ver, que iría más acorde con la historia original y que hubiera aportado un toque extra de drama. No quiero decir que tal y como se plantea en el libro no me haya satisfecho, es más, he vivido ese romance muy intensamente, pero no esperaba, una vez más, esa facilidad con la que surge y que, por desgracia, se hace previsible en un comienzo.
Entiendo la crueldad, pero la bondad me asusta, no sé muy bien cómo defenderme de ella.En resumen, El tercer deseo es una lectura que cuenta con elementos muy buenos que pueden llegar a ser una auténtica delicia para el lector. Posee una narración muy potente, una ambientación exquisita y una trama de fantasía muy intensa. Es el retelling que llevaba tiempo esperando.
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Y esto es todo por hoy, nos leeremos en la próxima entrada. Hasta entonces, ¡felices lecturas!